Solidaridad: miembros del Club Ika ayudaron a recuperar el techo de un puesto de El Nihuil afectado por el Zonda

Hace algunos días, producto del fuerte viento Zonda fue gravemente dañado el techo del puesto Soto, en inmediaciones de El Nihuil, cerca de las dunas. Al conocer el caso, integrantes del Club Ika de San Rafael hicieron un relevamiento, consiguieron los materiales y trabajaron duro para volver a construirlo en algunas horas.
Eduardo Zenobi, integrante del Club Ika, recordó en diálogo con FM Vos (94.5) y con Diario San Rafael, que han tenido muchas reuniones en ese puesto que con el viento de aquel sábado, sufrió la pérdida de todo el techo del salón.
“Gracias a Dios no hubo ningún daño a quienes estaban adentro, porque fue a las 3 de la tarde, estaban todos almorzando ahí adentro y fue con mucha suerte porque se voló completo el techo (tablas, rollizo, chapas, todo). Nosotros acudimos el día domingo para ver todos los daños que habían pasado; lo que necesitábamos era material y mano de obra, y empezamos con esta movida de ir y tratar de darles una mano, porque realmente a ellos les cuesta mucho llegar con los materiales y mano de obra a esos lugares”, dijo.
Recordó que el sábado a las 8, ya había más de 20 personas en el lugar dispuestas a trabajar, y alrededor de las 16 ya estaba todo instalado y arreglado incluso con aislante. “La verdad es que tenemos que agradecer también, porque cuando comentamos en el grupo del club lo que había sucedido y empezamos a pedir los materiales, en dos horas conseguimos todo”, aseguró.
Zenobi hizo hincapié además, que el puesto de Miguel Soto es muy importante, siendo un hombre que ha brindado mucha ayuda a muchas personas que lo han necesitado.
“Él nos conoce desde hace muchos años, no solamente al club sino a la gente que va y hace la pasada por el puesto. Cuando fuimos aquel domingo le llevamos alimentos no perecederos, porque sabíamos la situación que podía estar pasando. Cuando empezamos a hablar con él, nos empezó a contar y ya confía en nosotros, así que él sabía que íbamos a estar el fin de semana siguiente en el lugar y realmente nos agasajó con dos chivitos, y a las 3 y media ya estaban haciendo un brindis abajo del techo nuevo, en el salón”, resaltó.