Thomas satisfecho por los resultados en el Censo de Fluidez Lectora: “Todo esto nos indica que las políticas están funcionando en los distintos ámbitos”

Durante las últimas horas, el titular de la Dirección General de Escuelas (DGE), José Thomas, a través de una entrevista que brindó a la emisora radial FM Vos 94.5, hizo un balance sobre su gestión y analizó los datos obtenidos en la segunda medición del Censo de Fluidez Lectora. En ese contexto, destacó el progreso en el área educativa post pandemia y las herramientas que se aplican para optimizar al máximo el sistema de enseñanza de la provincia de Mendoza.
«La verdad es que estamos muy contentos con los últimos resultados del Censo de Fluidez Lectora porque nos muestra mejoras que se sostienen en el tiempo. Desde el 2021 se vienen bajando los niveles críticos y por eso se logró disminuir la brecha en educación entre ruralidad y zonas urbanas. Todo esto nos indica que las políticas que estamos aplicando están funcionando en los distintos ámbitos de la gestión», aseguró José Thomas al comienzo del reportaje.
«La educación en el mundo tiene un problema sistémico, que es que en los lugares donde los contextos son más complejos es más difícil educar. Por eso, se imparten distintas políticas para poder remediarlo porque el acceso a la educación debe ser un derecho igualitario para todos. En este sentido, desde la aplicación de los primeros Censos de Fluidez hasta hoy, hemos instrumentado herramientas muy concretas, como promover la jornada completa en más de 200 escuelas rurales con el fortalecimiento de la trayectoria escolar en los niños que tienen un bajo rendimiento. Así logramos que la brecha se achique año tras año», continuó fundamentando Thomas.
Después, destacó la importancia del Censo de Fluidez Lectora y su alcance. «Para que un chico pueda comprender tiene que leer a un ritmo mínimo y debe poder decodificar para entender lo que significa un conjunto de palabras. La fluidez lectora demarca una gran interrelación con la comprensión, que también viene mejorando, aunque los procesos de mejoras de fluidez lectora son más rápidos de asimilar que los de la compresión. Las evaluaciones en torno a esto son más complejas, trabajamos sobre todas las áreas: escritura, matemáticas y comprensión lectora. La evidencia nos muestra que también hay una relación entre fluidez lectora y los resultados en matemática. Cuando un chico adquiere una fluidez sólida y automática, libera sectores en el cerebro para poder comprender y hacer otras cosas como reflexionar o poder analizar un ejercicio matemático. Es algo muy importante en correlación con los otros aprendizajes de la escuela», argumentó el titular de la DGE.
«Los docentes hoy tienen una gran formación y pueden entender la diversidad educativa, en el sentido de que hay chicos que pueden presentar dificultades a la hora del aprendizaje. Además, se fortalecen las trayectorias escolares con jornadas extendidas, hay más de 20 mil chicos en Mendoza que se quedan en la escuela con horas extras para consolidar y nivelar un aprendizaje fundamental como es la fluidez lectora. Siempre se focaliza más en aquellos que tienen más dificultades. Hoy la buena noticia es que son pocos los chicos que están en un nivel bajo. Un ejemplo de ello, es que el 80 % de los alumnos de tercer grado está sobre el nivel esperado en lo que refiere a esto. Son números muy buenos, entonces se puede poner la atención sobre los niños que tienen la trayectoria más débil para que puedan mejora rápidamente», destacó.
A su vez, se refirió a cómo repercutió la pandemia en la educación y explicó las políticas que se aplicaron para mejorar los niveles de los estudiantes. «El primer Censo de Fluidez Lectora fue a principios del 2021 porque se entendió la gravedad de las consecuencias de la pandemia. Eso nos permitió instrumentar diferentes políticas a tal punto de que son reconocidas por el Banco Mundial en un documento. El mismo se está por publicar y destaca las herramientas establecidas para recuperar los niveles de saberes prioritarios de lectura y compresión lectora durante la etapa pospandemia. Hicimos mucho hincapié en conocer la realidad de cada estudiante que integra el sistema educativo para asignar los recursos y resolver el problema. Los docentes hacen un gran esfuerzo en el aula para que los chicos aprendan. Creo que es uno de los grandes logros. El censo se aplica en todos los grados a partir de segundo», precisó.
«Un grado determinante es tercero. Ese es el punto de inflexión, ya que se debe tratar de lograr de que todos los alumnos que ingresen a esa instancia tengan buena fluidez lectora y comprensión adecuada para que el resto de la educación sea más fácil, eficiente y productiva para cada chico», añadió.
Por otra parte, se refirió a otro logró a nivel educativo, puesto que Mendoza será sede del Congreso Internacional de Alfabetización, Lectura y Escritura 2023. «El año pasado se sancionó la Ley de Alfabetización, y nos indica que tenemos que hacer mediciones y ayudar a los estudiantes que tienen más dificultades. Por eso hay que fomentar la formación docente y la investigación de forma permanente. En esta línea, se organizó este congreso internacional que tiene como objetivo hacer un intercambio entre Argentina y Latinoamérica para mejorar las políticas que están teniendo éxito en este ámbito. Va a participar todo el sistema educativo de Mendoza y el de todas las provincias del país. Además de distintos países de América Latina. Todos los docentes se podrán capacitar vía streaming. Habrá talleres de cómo trabajar en el aula. Se trata de un evento muy importante. Se desarrollará el 21 y 22 de setiembre en el Espacio Cultural Julio Le Parc», informó el director de la Dirección General de Escuelas.
«La política de alfabetización que hacen los docentes en las aulas ha sido reconocida por el Banco Mundial en varias oportunidades, por eso el congreso se realiza en Mendoza. Debemos estar orgullosos de lo que estamos generando. La mayor felicidad es que los chicos están aprendiendo en base a las políticas de alfabetización», resaltó.
Después, definió el lema del congreso y subrayó que se pone énfasis en las trayectorias reales. «Lo que estamos en educación y los padres se dan cuenta de que las trayectorias reales no son las teóricas, porque los chicos llegan algunos niveles y no obtienen una compresión adecuada. Las trayectorias reales acompañan la posibilidad de cada estudiante con el fin de estimularlo y así adquirir los aprendizajes que necesitan. Hay que profundizar en la trayectoria individual y no en la teórica que abarca al 100 %. Hay que conocer qué le pasa a cada uno de ellos. El contexto es determinante para la alfabetización» sentenció Thomas.
«No sirve solamente ver lo que hace en el aula, sino se conoce cómo vive ese chico ni dónde nació o qué lengua hablan sus padres. Los docentes debemos estar bien formados para acompañar estas trayectorias reales. Hay que hacer foco en la realidad de cada uno de los estudiantes. Hoy la tecnología es útil siempre dependiendo de cómo se la use, pero un alumno que tiene buena compresión lectora usa mucho mejor está herramienta, ya que obtiene mejores resultados por ejemplo si indaga con la IA (Inteligencia Artificial). Hay que saber reflexionar para volver a reformular las inquietudes. La tecnología es absolutamente necesaria para la vida, pero los conocimientos básicos y elementales que son previos a ella son más importantes», concluyó José Thomas.