La Asociación Proteccionista de Animales «Perros de la Plaza Independencia» fue denunciada a través de un posteo de Facebook por sacarle un perro que le había dado en adopción a una mujer de 75 años, a quien se lo quitaron porque no tenía el collar, aún estando dentro de la casa.
Ilda es una la jubilada que se había encariñado con el perro, con quien convivió durante dos meses. Pero según contó una de sus hijas a El Sol, dos voluntarias de la asociación que hacían un seguimiento de la adopción se lo llevaron al ver que el animal no tenía el collar, pese a que madre les explicó que Inti “tenía calor y se rascaba”.
«Así, simple y desalmadamente, como si fuera un objeto que puede ser arrancado y llevado de un lugar a otro. Mucho se ha discutido sobre el carácter y los alcances del proteccionismo animal y sin dudas que la mayoría de la gente que trabaja voluntariamente en ese ámbito lo hace no solo de corazón sino sensatamente. Sin embargo, además del dolor y la impotencia, surgen varias preguntas: ¿qué se puede hacer como adoptante frente a un proteccionismo mal entendido en el que el ‘seguimiento’ se transforma en obsesión y la ‘supervisión’ se vuelve ejercicio insensible de un poder auto-atribuido?», se preguntó Lucía, una de las hijas de Ilda en su posteo de Facebook.
Y agregó: «¿Quién supervisa a su vez a estas personas y realiza un seguimiento para corroborar si aplican o no para con los animalitos y las familias adoptantes una mirada criteriosa y justa de las premisas que parecen repetir como autómatas?».
Lo cierto es que la mascota volvió otra vez a un hogar en tránsito. Lucía contó que su mamá tuvo un pico de presión, ya que sufre de hipertensión y que afortunadamente pudieron estabilizarla. Pero puso en tela de juicio el accionar de estas entidades, su falta de control y las consecuencias de su proceder.
La palabra de la asociación
Silvia Lo Bello, una de las voluntarias que participó en el proceso de adopción, explicó que uno de los requisitos para que la nueva familia se quede con el animal es tenerlo en un lugar seguro y que lleve un collar.
«Los caniches son bastante escapistas. Por eso, aunque parezca menor, le pedimos a la gente que lo identifique y lo tenga con el collar», remarcó Lo Bello. Además destacó que en las Fiestas de Fin de Año hay muchos perros perdidos y que por ese motivo «es fundamental que tengan identificación».
«En los contactos que tuvimos con la familia vimos que Inti no tenía el collar a pesar de que le comentamos en varias oportunidades su importancia. Ayer (por este lunes), cuando le llevamos uno nuevo, lo vimos otra vez sin este elemento y la señora nos dijo que no le ponía eso a sus perros dentro de la casa, pero sí para salir», agregó sorprendida.
Por último, dijo que la política de la institución es hacer un seguimiento y hacerse cargo de los perros por «si hay algún inconveniente». Y aclaró «que no hubo intención de hacerle mal a nadie».
