El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Eugenio Burzaco, el auditor General de la Nación y precandidato a diputado nacional, Miguel Ángel Pichetto, y el postulante a senador por la provincia de Buenos Aires José Luis Espert afirmaron que «los gobiernos kirchneristas siempre han buscado someter a las Fuerzas Armadas vaciando la función principal que tienen en la defensa de la soberanía nacional».
En ese sentido, presentaron una serie de propuestas con el objetivo de reivindicar las funciones de las FF.AA. para que tengan «un rol preponderante en el desarrollo del país», a partir del 10 de diciembre.
En este sentido, los funcionarios denunciaron que el kirchnerismo intenta «domesticar a las Fuerzas Armadas a través de una mayor injerencia en el sistema de ascensos, condicionando los mismos al criterio educativo de la altamente politizada Universidad de la Defensa Nacional y abriendo así, la puerta para someterlas a su juicio y voluntad».
Burzaco, Pichetto y Espert aseguraron que el proyecto encabezado por el Gobierno Nacional trata «de un nuevo ensayo de ideologización y atropello contra las Fuerzas Armadas que limita seriamente la modernización y maximización de los recursos humanos a contracorriente de lo que sucede en el mundo».
«Nos oponemos firmemente a este nuevo embate a las Fuerzas Armadas, que han demostrado una y otra vez resiliencia a estos ataques», remarcaron los funcionarios.
Además, enumeraron cinco propuestas referidas a las Fuerzas Argentinas que implementarán a partir del 10 de diciembre si se convierte en el nuevo presidente de la Nación el actual jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ya que aseguraron que «en la Argentina que viene, las Fuerzas Armadas tendrán un rol preponderante en el desarrollo del país».
La primera iniciativa tiene que ver con «priorizar el capital humano de las Fuerzas Armadas, con aumento salarial de inmediato, de manera que iguale el salario de las fuerzas de seguridad».
«Además, establecer un cupo específico y permanente de los fondos de financiamiento estatal de viviendas para destinarlo específicamente al personal militar y de las fuerzas de seguridad», indicaron.
Como segundo punto, los funcionarios ejecutarán «de manera inmediata un programa de reequipamiento, priorizando la recuperación de capacidades como, por ejemplo, con la incorporación de aviones caza multirol de 4ta generación para la Fuerza Aérea, vehículos blindados 8×8 para el Ejército y submarinos para la Armada».
En el tercer ítem, se buscará «despolitizar el Fondo Nacional de la Defensa (FONDEF), asignando sus valiosos recursos a la compra de materiales vitales para el sistema de defensa e incorporando la producción nacional en aquellos sectores donde haya ventajas comparativas».
«Fuerzas Armadas activas y operativas para custodiar los espacios soberanos y los objetivos estratégicos del país, para blindar las fronteras contra el narcotráfico, el tráfico de armas y de personas. Las fuerzas de seguridad serán desplegadas en las ciudades para combatir el delito», expresaron los políticos como cuarto punto del documento presentado.
Y como quinta propuesta, esperan «recuperar el protagonismo de las Fuerzas Armadas en ejercicios internacionales, en misiones de paz y en el apoyo de la política exterior».
«Para nosotros las Fuerzas Armadas son instituciones vitales de la democracia y para el desarrollo de Argentina. Su rol está asignado en la Constitución. Cumpliremos con ese mandato», concluyeron.
