El precio de la carne no escapa al contexto altamente inflacionario que vive la Argentina. Su valor sigue en franco ascenso. En las carnicerías tuvo un alza del 15.8% durante enero y de 394.3% con respecto al mismo mes del 2023. Por otro lado, el precio promedio en supermercado mostró una variación del 28.2% con respecto al mes anterior y del 339.7% interanual.
Las principales alzas en precios promedio durante el primer mes del año se dieron en la tapa de asado (23.7%), el lomo (23.3%) y la colita de cuadril (23.2%). En cambio, los cortes con menores aumentos en sus precios fueron la picada común (6.3%), osobuco (12.4%) y carnaza común (13.7%). Esta suba se suma a la que se dio en diciembre, que trepó al 40% tras el incremento que tuvo la hacienda en el Mercado Agroganadero de Cañuelas. El presidente de la Cámara de Abastecedores de Carne de Mendoza, José Rizzo, adelantó ante los micrófonos de FM Vos 94.5 que es inminente un nuevo aumento. «El mercado de la semana pasada fue muy corto y eso hizo que el ingreso de hacienda no cubriera la demanda. Por ello, el producto tuvo una suba cercana al 10 o 15%. Los abastecedores y faenadores ya aplicaron estos aumentos. En estos días se acabará de generar el nuevo precio. Hay que esperar si el nuevo valor se confirma en el Mercado Agroganadero de Cañuelas», precisó José Rizzo al principio de la entrevista. Después, aseguró que en las últimas semanas hubo una retracción muy pronunciada del consumo. «Estamos trabajando muy mal por la retracción del consumo. Estamos especulando en contra de nuestros propios intereses para ver si podemos trasladar a los precios las subas de los costos operativos. La gente dejó de consumir mucho los cortes con huesos. No compra tanto asado como antes. La gente adquiere otros tipos de carnes que están más baratas como pollo y cerdo», fundamentó. Asimismo, sostuvo que esta merma en el consumo perjudica seriamente a muchas carnicerías de barrio. «Este gobierno tiene una política amplía de exportación. El mercado interno quedará desabastecido, por lo que se competirá con los precios del exterior con un salario del trabajador, el más bajo de la región. Los pequeños comercios van a vivir momentos muy difíciles. Los alquileres suben y las boletas de luz también. Lamentablemente, la recesión dejará a muchos negocios en el camino», advirtió. Para terminar, opinó sobre las medidas de mercado que impulsa Javier Milei. “La política de libre mercado no es la adecuada. Nos vamos de un extremo a otro. El gobierno de Alberto Fernández regulaba los precios con el cierre de las exportaciones. En contrapartida la política de Javier Milei se concentra en la libre exportación, hay que estar atentos y observar que los precios internacionales no arrastren a los valores del mercado interno. Para que esto no suceda debe haber una amplia oferta con una buena recepción de la demanda. En este momento como la oferta no es demasiada, la demanda tiene que absorber los valores de la escasez que hay», concluyó Rizzo.
