Investigadores de la Universidad de Miami certificaron, gracias a la tecnología digital, una “autopista” de 100 kilómetros que conectaba los puntos del imperio maya en Yucatán.
El camino, llamado “Sacbé”, tenía un sentido espiritual y religioso porque era una ruta de peregrinación y una fuente de poderío económico. Mide 100 kilómetros de largo y la construyeron hace 13 siglos, es decir 1300 años, siendo el punto de unión de las ciudades de Yaxuná y Cobá.
Los arqueólogos de la Universidad de Miami usaron tecnología láser para conocer esta autopista que ahora esta cubierta por una espesa vegetación. En aviones de bajo vuelo, disparaban pulsos rápidos de luz láser a una superficie y luego medían la cantidad de tiempo que tardaba cada pulso en recuperarse. Las diferencias en los tiempos y las longitudes de onda del rebote se utilizaron para crear mapas digitales en 3D de las estructuras de superficie ocultas.
Además, la investigación reveló que no es un camino recto, como se suponía, sino que serpentea para conectar pueblos y ciudades. La ruta fue construida por K’awiil Ajaw, una reina guerrera de la ciudad maya de Cobá, alrededor del año 680 a. C. Ella quería crear una vía para que sus ejércitos pudieran viajar a Yaxuná para conquistarla y hacerle frente a la dominante Chichén Itzá.
¿Quién construyó el camino?
La ruta la construyó K’awiil Ajaw, una reina guerrera de la ciudad maya de Cobá, alrededor del año 680 a. C. De acuerdo con los investigadores, ella quería crear una vía para que sus ejércitos pudieran viajar a Yaxuná para conquistarla y hacerle frente a la dominante Chichén Itzá.
La reina guerrera que construyó la ruta, K’awiil Ajaw, aparece con esculturas de piedra donde se la ve pisoteando a sus rivales.
Los científicos publicaron su estudio en el Journal of Archaeological Science e informaron que identificaron más de 8 mil edificios y pirámides. El estudio confirmó que el camino tiene 8 metros de ancho. «Hubiera sido un faro a través del denso verde de los campos de maíz y los árboles frutales. Toda la jungla que vemos hoy no estaba allí en el pasado porque los mayas despejaron estas áreas. Necesitaban madera para construir sus hogares. Y ahora que sabemos que el área estaba densamente ocupada, sabemos que necesitaban mucha madera. Porque también lo necesitaban para quemar piedra caliza y construir el camino más largo del mundo maya hace 13 siglos», concluyeron los científicos.
AVD
