El comedor Caritas Felices pide colaboración para darle de comer a las 300 personas que asiste

Hilda Rodríguez es de las mujeres que tienen un corazón inmenso y no se dejan intimidar por las dificultades. Ella hace tan sólo un par de años abrió el comedor “Caritas Felices” y con trabajo y dedicación sigue asistiendo a los más humildes. Pero hoy su obra, necesita de la colaboración de los sanrafaelinos.
Al respecto dijo a FM Vos (94.5) y Diario San Rafael que “el comedor Carita Felices nace hace 8 años con 20 niños. En el 2014 se abre en el Barrio El Molino y llegamos a tener casi 300 chicos, entre este comedor y dos sucursales más en el mismo barrio. Después pasaron los años y la gente no hizo buen manejo en las sucursales y ahora queda mi merendero. Está funcionando como organización sin fines de lucro, tenemos todos los papeles, con personería jurídica”, relató Rodríguez.
Añadió que “este año de la pandemia, ha sido muy difícil para mí que soy mayor. Tengo 75 años y el encierro me ha dejado secuelas. Como no nos permiten tener chicos encerrados dentro del comedor, todo el año hemos trabajado con bolsitas. Se las damos para que le cocine la mamá. Le damos carne, pollo, verduras, legumbres. Ahora estamos ayudando a unas 300 personas nuevamente, es decir que estamos ayudando a 50 familias numerosas, entre padres, hijos y abuelos”.
Dijo que, “por mi problema de salud, y como no podemos tener chicos dentro del comedor, hemos abierto una sucursal en la entrada del barrio. Ahí hay una señora, Fabiana, que está cocinando de lunes a sábado, donde tres veces por semana le dábamos comida y el resto bolsitas. Pero lamentablemente ahora, hemos suspendido las bolsitas por la carencia que tenemos. Hemos terminado la pandemia con las estanterías re vacías, no tenemos nada de mercadería y estamos trabajando con lo que le donan en el día las empresas”.
Y agregó que “durante la pandemia nos donaban más los supermercados, pero ahora ya no nos donan tanto. Tenemos muchos niños, y esta señora está teniendo entre 80 y 100 niños por día. También hay gente que se acerca, pero ya estamos agotando eso también. Por eso necesitamos que nos ayuden y colaboren. La sucursal del comedor está en el callejón El Diamante 40, hay un cartel grande que dice ́Comedor Caritas Felices ́ de Fabiana Avecilla. Está pasando el Marginal, la primera entrada a la derecha”, indicó.
Para concluir, Hilda dijo que “estamos necesitando de todo, mercadería para darle a los chicos y así sus mamás les pueden cocinar. También azúcar, harina para hacerles la merienda, cereales, lo que es la leche nos ayuda el Club Lechero. Seguimos funcionando porque la mesa directiva de nuestra institución benéfica está a full”, comentó y sostuvo” me pone muy mal cuando Fabiana me comenta que cuando no hace nada de comer porque no tiene mercadería, los niñitos le preguntan hasta tres o cuatro veces al día si va a cocinar porque tienen hambre. Me quedo tranquila porque esta señora que me está reemplazando hasta que me reponga de mi salud, los alimenta muy bien”.