Una explosión en un edificio en el barrio de Goya, en la ciudad española de Madrid, provocó dos muertos, 17 heridos de carácter leve y uno grave, que se encuentra en la UCI del hospital de la Princesa.
Los fallecidos son dos operarios de fontanería de 21 y 27 años que habían bajado al sótano a cerrar la llave de gas al notar el olor. El plomero de mayor edad era hondureño y se llamaba Miguel Alexander. Tenía una mujer y dos hijos, de 10 meses y cinco años. El otro operario, de nacionalidad española, se llamaba Ernesto y tenía un hermano a las puertas del edificio.
Además, tes de los heridos fueron trasladados al propio Hospital de la Princesa y uno al Gregorio Marañón. Se encuentra grave un hombre de 84 años, está en cuidados intensivos con diversos politraumatismos. Una mujer embarazada, de 36 años, también fue ingresada en el Hospital Gregorio Marañón, pero ya fue de alta tras permanecer varias horas en observación.
Según detalló el jefe del operativo, Rafael Ferrándiz, los dos operarios fallecidos se encontraban atrapados bajo dos metros de escombro macizo en uno de los patios, según detectaron los perros.
Aún se desconocen las causas de la explosión, aunque todo apunta hacia un escape de gas. Los Bomberos, tras analizar el estado del edificio, informaron que tenía daños estructurales. Analizan el estado del inmueble contiguo, el número 33, y siguen tratando de retirar los cascotes disparados de la fachada durante la explosión.
Los vecinos de los edificios contiguos debieron evacuar sus casas porque los expertos están analizando los daños que sufrieron los edificios y su estructura. Por el momento, están alojados en hoteles. Los residentes del bloque del número 35 tampoco podrán regresar a sus residencias porque la edificación se encuentra en riesgo de derrumbe.
«Incidente en curso en zona General Pardiñas con calle Ayala. Se ruega permanecer atentos a las indicaciones de los servicios de emergencia y facilitar el acceso a la zona a los mismos», informó la Protección Civil de Madrid.
Al lugar también trasladaron Bomberos y las Policías Nacional y Municipal, que trabajan sobre el terreno para ayudar a los heridos. A última hora de la mañana de ayer llegó el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, y la delegada de Seguridad y Emergencias, Inmaculada Sanz.
Almeida dijo que «todas las hipótesis están abiertas», ha indicado que la normalidad » y señaló que tardará «en restituirse en esta zona. La Policía Municipal está regulando el tráfico, ha cortado Ortega y Gasset y Goya y ha desplegado la Sección de Apoyo Aéreo para captar imágenes con los drones desde arriba para identificar posibles atrapados en el edificio».
En la tarde de el viernes, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también se acercó al lugar de los hechos para «trasladar apoyo a los heridos y a su entorno y reconocer el tremendo trabajo a contrarreloj» de los cuerpos de seguridad.
«Afortunadamente los niños del colegio están bien y ha quedado en un susto», apuntó la líder regional.
El piso que implosionó es uno de los áticos de este edificio de cuatro plantas de la calle Pardiñas en el que se estaba produciendo una reforma. En las inmediaciones del edificio se encuentra el colegio Virgen de Loreto, con un importante número de menores en su interior al ser día lectivo. Esos escolares se encontraban en el horario de comida, fueron llevados al patio y allí los servicios de emergencia les han atendido.
El Ayuntamiento de Madrid declaró el Procedimiento de Incidentes Complejos (PIC), un protocolo de coordinación de todos los servicios y cuerpos de seguridad que estarán coordinados por los Bomberos.
