Héroes de cuatro patas: el Cuerpo de Canes de la Policía cumplió 46 años en San Rafael

En la intrincada tarea de salvaguardar vidas y garantizar la seguridad en la provincia, el Cuerpo de Canes de la Policía emerge como un bastión de eficacia y compromiso. Con base en la calle Amapola 43 de San Rafael, estos fieles compañeros y sus guías despliegan un trabajo minucioso y vital para la comunidad.
El oficial principal Juan Eduardo Morales, responsable del Cuerpo de Canes en la zona sur de Mendoza, relató más acerca del universo de estos héroes de cuatro patas.
“El cuerpo de Canes de la Policía de la provincia de Mendoza, en este caso el cuerpo de Canes, zona sur, donde pertenecemos, es una dependencia particular por el hecho de que, si bien prestamos todos los servicios inherentes a la función policial propiamente dicha, le anexamos el trabajo con los perros, ya sea en función de seguridad o de búsqueda o rastro de personas”, explicó Morales a Diario San Rafael y FM Vos 94.5.
La esencia de su labor radica en la estrecha relación entre guía y can, una simbiosis que trasciende lo meramente profesional. “Se debe formar un vínculo, como le decimos nosotros, que esto lleva a que el trabajo, ya sea en rastro o seguridad, intervención, sea productivo. Por lo cual, bueno, es necesario un tiempo de adaptación de tanto el policía al can como el can a los efectivos”, añadió con convicción.
Con dos razas como principales aliados, el ovejero alemán y el pointer inglés, el Cuerpo de Canes enfrenta cada desafío con determinación. “En la actualidad contamos con un total de 14 ejemplares, 11 ovejeros alemán y 3 pointer inglés”, reveló Morales. El adiestramiento es una constante en la rutina diaria, un compromiso que demanda horas de dedicación y paciencia. “Es un trabajo diario, demanda gran cantidad de horas, de tiempo, de estar, de ir granito a granito para no apurar el proceso, pero sí, es un trabajo bastante lindo, muy lindo y algo a la vez que uno siente la satisfacción cuando ve los resultados”, expresó con orgullo.
La preparación no se limita a los canes, sino que se extiende a los agentes que los acompañan. “Los policías deben prepararse, introducirse en lo que es la función específica que llevamos a cabo, eso se realiza a través de capacitaciones”, puntualizó Morales. La empatía y comprensión hacia las distintas personalidades caninas son clave en este proceso. “De acuerdo al temperamento y carácter de cada animal uno va viendo cuál va a ser el perfil de trabajo de cada perro y se le trata de aprovechar, de acuerdo a ello, en qué lo vamos a utilizar”, añade.
La dedicación es total, incluso en los momentos más desafiantes. “El perro, hay días que, como uno, tiene más o menos ganas, o ver el cuidado diario, puede sufrir algún tipo de dolencia y demás, todo eso diariamente los efectivos lo van monitoreando y para que a la hora de salir al servicio con los canes estén en óptimas condiciones”, aseguró Morales.