Una entidad que existe desde hace mucho tiempo y que posee un lugar central en la cultura local es la Federación Gaucha, una de las organizaciones que se encuentran ofuscadas por el robo y matanza clandestina de caballos para el consumo de su carne. Su presidente, Walter Riesco, dialogó con FM Vos (94.5) y Diario San Rafael.
“Fuimos a ofrecer datos a la Comisaría 38° de todos estos hechos vinculados a la matanza de los seis caballos y un novillo que mataron y de este domingo que se robaron tres caballos que, gracias a Dios, dos de ellos fueron recuperados sanos y salvos. Lamentablemente el tercero apareció este martes carneado detrás de la planta y servicio de la Municipalidad”, comentó.
Añadió que “son animales que eran mascotas como el que carnearon, ya que era grande de 700 kilos, pertenecía a un amigo Marcos González que lo tenía desde potrillo. El caballo iba a cumplir 20 años a fin de mes, un animal que siempre lo acompañó, estuvo en su casa muy cuidado. Esta gente que lo conocía a Marcos no tiene códigos. Siempre busca caballos mansos y así se lo llevaron y lo faenaron en el barrio El Molino”.
Dijo que “nosotros sabemos quiénes son, están perfectamente identificados, e inclusive este martes me llegaban mensajes y llamadas de dónde estaba la carne, quién la tenía y la iba a fraccionar. Estamos preocupados porque queremos saber qué va a hacer la justicia. Entendemos que es lerda y tenemos que comprender que tienen que tener pruebas muy contundentes para realizar un allanamiento. Creo que serán próximamente aprendidos y quedarán a disposición de la justicia”.
En este aspecto, resaltó que “esta gente comete varios ilícitos, porque a veces compran el caballo y lo reducen y una persona va a comprar confiada chorizos, milanesas o blanda y está comprando carne de caballo. Encima es carne que no ha sido carneada con las condiciones de higiene correspondientes, quizás caballos que no están vacunados o son caballos enfermos, con el peligro de que esta carne salga al mercado”.
Riesco pidió que “la gente tiene que denunciar porque los fiscales no pueden trabajar. Sabemos que es gente complicada, hasta uno de los que anda robando caballos ‘tiene puesta una tobillera’. Hemos hecho las denuncias, pero hay que ver qué medidas van a tomar. Sabemos quiénes son, están identificados y hasta la persona que compra esta carne también. Es gente que hace mucho tiempo que se dedica a esto. Por ejemplo, los de El Molino, han salido en libertad hace poco tiempo, estaban implicados con la gente de Pueblo Diamante que vendía carne de caballo. Han salido libres y están otra vez con esta práctica. La gente está cansada y quiere que esta gente termine en la cárcel o va a terminar con alguna tragedia”.
Para concluir, y esperando el accionar de la justicia, sostuvo que “también hay muchos comerciantes que saben la procedencia de esta carne y estafan a la gente. En los barrios marginales la gente no puede comprar la carne a 1500 pesos y compra ésta mucho más barata, pero por el volumen de carne que se maneja, hay comerciantes que están y saben la procedencia de esta mercadería” sentenció Riesco.
