La siembra de hortalizas en San Rafael cayó con respecto al año anterior

En un recorrido por los campos y huertos de San Rafael se vislumbra el paisaje característico de una región donde la agricultura es una parte fundamental de la vida cotidiana. Sin embargo, detrás de la aparente calma y belleza de los cultivos, se esconde una compleja red de desafíos y oportunidades que definen el futuro de la producción hortícola en la provincia.
Dentro de ese marco aparecen las declaraciones de la ingeniera agrónoma Victoria Farmache, una experta del Instituto de Desarrollo Rural, cuya experiencia y conocimientos arrojan luz sobre los avatares de este importante sector económico. “La siembra anual de hortalizas en Mendoza ha experimentado ciertas fluctuaciones en la última temporada”, comentó a Diario San Rafael y FM Vos 94.5
Según los datos recopilados por Farmache, la siembra de hortalizas en San Rafael ha mostrado un descenso del cuatro y medio por ciento en comparación con el ciclo anterior. “Es evidente que la situación presenta ciertos retos que requieren nuestra atención y acción inmediata”, destacó la ingeniera agrónoma.
San Rafael, conocido por su diversidad de cultivos a pequeña escala, enfrenta la disminución de la superficie destinada a la producción hortícola. “Particularmente, esta temporada hemos observado un 14% menos de superficie cultivada, lo que representa un cambio significativo en la dinámica agrícola de la región”, explicó Farmache.
Entre los cultivos más destacados de la región se encuentra el ajo, que ocupa un lugar privilegiado en los campos sanrafaelinos durante el invierno. “El ajo es, sin duda, uno de los cultivos más importantes para nuestra economía agrícola. Durante el invierno pasado, aproximadamente 300 hectáreas de nuestros campos estaban dedicadas a esta preciada planta”, reveló la ingeniera.
Sin embargo, la situación del ajo no es homogénea en toda la región. Mientras que en algunas zonas, como Las Malvinas, el cultivo se mantuvo estable a lo largo del tiempo, en otras áreas se observó un cambio de preferencias hacia cultivos alternativos. “En Las Malvinas, por ejemplo, el ajo sigue siendo un cultivo constante en el tiempo, mientras que en otras regiones estamos viendo una transición hacia el cultivo de pasturas en lugar de hortalizas durante el verano”, señaló Farmache con preocupación.
La diversificación de cultivos es otro aspecto destacado de la agricultura en el departamento. Farmache señaló que “a diferencia de otras regiones especializadas en ciertos cultivos, San Rafael se distingue por su amplia gama de productos hortícolas. Desde ajo y papa hasta tomate, zanahoria y choclo, nuestros agricultores cultivan un poco de todo para abastecer tanto el mercado interno como los comercios locales”.
La situación a nivel provincial también presentó sus propios desafíos y oportunidades. Según los datos proporcionados por Farmache, la siembra de ajo en toda la provincia ha experimentado un aumento en comparación con el año anterior. “La siembra de ajo pasó de 13,365 hectáreas a 13,840 hectáreas, lo que refleja una tendencia al alza en la producción de este cultivo”, comentó con optimismo moderado.
Sin embargo, la ingeniera agrónoma advirtió que estas cifras deben interpretarse dentro de un contexto más amplio. “Si bien es alentador ver un incremento en la siembra de ajo, es importante tener en cuenta que estas fluctuaciones son parte de la dinámica normal del mercado agrícola. La clave está en encontrar un equilibrio sostenible que garantice la prosperidad a largo plazo de nuestro sector”, subrayó.